YATASTO
-"Por qué no lo corre usted Contreras?" le preguntaba la barra al jockey de Yatasto.
-"Debe ser por mi apellido, no?" contestaba a pura risa.
El caballo del pueblo que jamás había perdido una sola carrera en el país, se jugaba la vida en San Isidro. El almanaque marcaba 30/11/1952 y el hijo de Selim Hassan y Yucca; y nieto de Congreve, se preparaba para desfilar en los tres mil metros.
Ese día, le dieron la monta a Legui, hace falta aclarar? No creo. No había feeling entre ambos. El Pulpo castigaba duro al animal por las mañanas y ese no era el trato que le dispensaba el jockey habitual al crack.
El gobierno del General Perón había pasado la dirección del hipódromo a la esfera estatal para desgracia de la oligarquía que había hecho de ese, su lugar de reunión.
Lejos de los paseos con sombrillas para el sol, los guantes y las galeras; el ambiente de la reunión sería una explosión de pueblo gritando por su pingo.
Más de 100 mil personas desbordaron el circo norteño y las autoridades decidieron, por primera vez en la historia, cerrar los portones para que no entrara nadie más. No cabía un alfiler.
Irineo vestido con las sedas del Stud Atenas hacía el paseo previo ante el delirio de la cátedra. El cuidador Juan de la Cruz estaba medio desconectado del asunto. Raro en él.
La multitud se preparaba para vivir un carnaval. Branding agarró la punta y el jockey uruguayo no lo iba a buscar. Finalmente, fue sobrepasado por Sideral quedando en tercer lugar el pupilo de Don Juan.
El silencio copó todo el escenario. Otro velorio en pleno año 52. Los gritos y las risas desbordaban la oficial donde la alta sociedad disfrutaba su venganza. Los amantes del cáncer volvían a dar rienda suelta a su odio.
En silencio, la muchedumbre, se retiraba con la cabeza gacha; mientras las botellas de champagne se multiplicaban en el sector exclusivo.
Mucha tela se cortó sobre esa jornada. Se había equivocado Leguizamo? Le dieron mal el plan de carrera? El ejemplar estaba en condiciones de correr? Todos tenían una versión diferente del hecho. Algunos llegaron a decir que el número uno había ido para atrás a cambio de una casa. Hecho que jamás pudo ser comprobado.
El 19/7/1953, en Palermo, clavó el record de la distancia 3' 04'' 200''' que jamás pudo ser superado hasta hoy. Siguió corriendo hasta el 11/10/1953 cuando se retiró ganando su carrera número 22.
Murió en el año 1958, lejos de su patria. La fusiladora ya había devuelto el manejo de San Isidro a la oligarquía cómplice. Un poco más tardaron en devolver el cuerpo que se habían robado, y más todavía, en animarse a competir en elecciones libres.
Pasaron casi 72 años de esa tarde nefasta y no se porqué me acordé de todo esto un día como hoy. Porque Yatasto era macho, no yegua. Si no todo hubiera tenido mas sentido. Hoy, que es día de cáncer y champagne a la carta.
EDUARDO TORRE
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